El Ayuntamiento de Barcelona reconoció el Genocidio Armenio

20 de mayo de 2021

La ciudad de Barcelona, capital de Cataluña, reconoció el Genocidio Armenio el 19 de mayo.

La Comisión de Presidencia, Derechos de Ciudadanía, Participación, Seguridad y Prevención del Ayuntamiento de Barcelona aprobó una resolución en la que se reconoce que "los hechos sufridos por la población armenia entre 1915 y 1923 tienen la consideración de un verdadero genocidio, de acuerdo con la Convención de las Naciones Unidas de 1948 para la Prevención y el Castigo del Crimen de Genocidio". Además, se rindió homenaje "a la memoria del millón y medio de víctimas inocentes armenias que murieron al Imperio Otomano, conmemorando el Genocidio Armenio con el espíritu de fraternidad, solidaridad, justicia y defensa de los derechos humanos que siempre ha caracterizado nuestra ciudad".

En ese sentido, se llevarán a cabo gestiones ante el Gobierno de España para que "suscriba el contenido de la Resolución del Parlamento Europeo de 1987, donde se reconoce el Genocidio Armenio perpretado por el Imperio Otomano, reafirmada por posteriores resoluciones de 2000, 2002, 2005 y 2015". Por último, se prevé un "apoyo al pueblo armenio en sus esfuerzos para consolidar su proceso democrático" junto con las instituciones de la comunidad armenia de Barcelona, entre las que se nombran a la Asociación Armenia de Cataluña "Ararat", la Asociación Cultural Armenia de Barcelona (ACAB), la Asociación Cultural Hayq Barcelona, la Asociación de Amigos de Armenia, el Consejo Parroquial de la Iglesia Apostólica Armenia y la Embajada de Armenia.

La presidenta del Parlamento de Cataluña, Laura Borràs, había recibido a representantes de la comunidad armenia local el 17 de mayo. De la reunión participaron la vicepresidenta primera, Anna Caula, y los secretarios Ferran Pedret Santos, Aurora Madaula y Pau Juvillà. El 22 de octubre del 2020 el Parlamento de Cataluña había condenado los ataques de Azerbaiyán contra la población civil de Stepanakert y apoyó las negociaciones basadas en la voluntad de la mayoría de los ciudadanos de Artsaj (Nagorno Karabaj). La resolución, que fue aprobada durante la guerra de Artsaj, condenó los ataques iniciados el 27 de septiembre “por parte de las fuerzas armadas de Azerbaiyán con el apoyo de Turquía”.

"Este año 2021 se cumple el ciento sexto aniversario del Genocidio Armenio, considerado el primer exterminio sistemático y deportación forzosa de época moderna. Iniciado el 24 de abril de 1915, con un programa de encarcelamientos masivos de cientos de intelectuales y líderes armenios de Constantinopla (actual Estambul), las matanzas y persecuciones al pueblo armenio por parte del Imperio Otomano se convirtieron en una constante durante la Primera Guerra Mundial, hasta principios de la década siguiente", detalla los fundamentos de la resolución.

"Estas tuvieron como objetivo último el exterminio de la población armenia, con el fin de permitir la creación de un estado turco etno-nacional culturalmente homogéneo. El desplazamiento y la deportación fueron acciones sistematizadas cometidas durante el Genocidio Armenio. Los hombres de la comunidad armenia eran enviados a campos de trabajo forzados, antes de ser ejecutados. Las mujeres armenias, los niños y los ancianos eran obligados a caminar en las llamadas 'marchas de la muerte' por el desierto sirio. Como resultado, se calcula que alrededor de 800.000 armenios fueron llevados a centros de deportación de Siria, 300.000 a la Armenia rusa, mientras que 1.500.000 personas fueron asesinadas. La crueldad y el horror del Genocidio Armenio supusieron una de las principales motivaciones para Raphael Lemkin en la creación del término 'genocidio' y en el impulso de proteger, en el futuro, a todos los pueblos del mundo de atrocidades como las vividas por el pueblo armenio, constituyendo la base de la Convención sobre la Prevención y el Castigo del Delito de Genocidio", continúa la resolución aprobada.

"La presente declaración institucional apoya la idea de que condenar el Genocidio Armenio es un acto de justicia, de defensa de los derechos humanos, así como para prevenir futuras atrocidades y crímenes contra la humanidad. En este sentido, en 2009 el Parlamento de Cataluña aprobó por unanimidad de todos los grupos políticos una resolución de reconocimiento del Genocidio Armenio así como, posteriormente, ciudades como Santa Coloma de Gramenet, Sabadell o Sant Hilari de Sacalm. En el mismo sentido, el reconocimiento de que los hechos sufridos por la población armenia entre 1915 y 1923 tienen la consideración de un verdadero genocidio, de acuerdo con la Convención de las Naciones Unidas de 1948 para la Prevención y el Castigo del crimen de Genocidio es un hecho ampliamente compartido como lo demuestra los siguientes reconocimientos: Sub-Comisión de las Naciones Unidas para la Prevención de la Discriminación y por la Protección de Minorías (Informe Whitaker 1985); Parlamento Europeo (1987, 2000, 2002, 2005, 2015); International Association of Genocide Scholars (1997); Consejo de Europa (2001); International Center for Transitional Justice (2002); Países (Alemania, Argentina, Armenia, Austria, Bélgica, Bolivia, Brasil, Bulgaria, Canadá, Eslovaquia, Estados Unidos, Francia, Grecia, Italia, Libia, Lituania, Líbano, Luxemburgo, Países Bajos, Paraguay, Polonia, Portugal, Rusia, República Checa, Siria, Suecia, Suiza, Uruguay. Chile, Chipre, Vaticano, Venezuela). Por encima de todo, esta declaración se hace desde el recuerdo de todas las víctimas del genocidio contra el pueblo armenio y el rechazo de éste y de cualquier genocidio o abuso sobre los derechos humanos en el presente y el futuro", finaliza el texto.

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